Hoy te traemos una guía muy sencilla para que aprendas a definir tus objetivos de inversión. Definir las metas para invertir es uno de los primeros pasos que debes hacer antes de apostarle a algún proyecto en bienes raíces o financiero, pues en concreto, es exactamente lo que esperas lograr y la probabilidad de recibir la ganancia que necesitas, por esto, deberás tener en cuenta factores como tus ingresos, tu edad, tu perfil de inversionista y las perspectivas futuras.
Es un hecho, a los seres humanos nos encanta ponernos retos, es estimulante para nuestra vida, además hay un fenómeno bastante curioso, entre más ambicioso es un objetivo, mayor será el esfuerzo que le dedicarás, y como lo que más cuesta es lo que más satisfacción nos da, es probable que te tardes un poco más en llegar a tu meta, pero el gusto de haber alcanzado lo que buscabas no tiene precio, no te centrarás tanto en las perdidas o ganancias inmediatas, sino que hay un plan, un proyecto que debes cumplir.
¡Es muy placentero cuando lo logras!
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Los objetivos de inversión son esenciales, aquí te contamos por qué
Plantearte objetivos antes de hacer una inversión te ayuda a que no tomes decisiones basadas en los resultados de tus inversiones individuales o decisiones que se toman por falta de información, con una estrategia basada en metas claras te centras en lo verdaderamente necesario para alcanzarlas, te permite cumplir con responsabilidades financieras futuras y que puedas generar riqueza a largo plazo.
A continuación, te compartimos varios pasos muy sencillos para que tengas una hoja de ruta y no te pierdas en la aventura de invertir, muy útil para los que a penas empiezan y necesaria por si no lo has intentado y tus apuestas son por la emoción o recomendaciones.
Guía exprés para definir tus objetivos de inversión
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Reflexión consciente sobre tu edad, ingresos y proyección a futuro
El primer paso es que seas muy consciente sobre tu edad y las expectativas que tienes con respecto a tu inversión, esto es importante para elegir el plazo que te pondrás para recibir tus rendimientos.
Sé muy honesto sobre las obligaciones que tienes que enfrentar en la actualidad y qué es lo que te gustaría poder pagar en el futuro.
Para que tu inversión sea exitosa tus ingresos son importantes porque esto determina la cantidad que tienes para invertir y la que puedes destinar a más inversiones que enriquezcan un portafolio diverso y dinámico.
Son tus ingresos los que te permiten invertir y estos son diferentes dependiendo de la etapa vital en la que te encuentres.
La edad es fundamental para esclarecer sobre tus necesidades actuales y futuras, dependiendo de tu edad habrá unos objetivos distintos, como comprar tu primera casa, invertir en una maestría o invertir en un complemento de bienes raíces para tu jubilación.
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Lluvia de ideas, lista de plazos para objetivos de inversión
En el siguiente punto es dónde estableceremos los plazos reales, pero esta lluvia de ideas es una aproximación a cómo visualizas tú el tiempo en el que te gustaría recibir tus rendimientos.
También para este punto es necesario que ya hayas hecho una investigación previa de los instrumentos de inversión en los que quieres poner capital, ya sea en bienes raíces o en activos financieros, asesórate e infórmate muy bien y ahí sí pasamos a la lista.
Divide tu lista en tres, objetivos a corto, mediano y largo plazo y sé muy realista. Puedes hacerla como en este ejemplo:
Objetivos a corto plazo:
- Vacaciones
- Comprar un automóvil
- Hacer un fondo para emergencias
- Invertir en instrumentos con liquidez inmediata y complementar para vacaciones, algún curso o comprar el coche.
Objetivos a mediano plazo:
- Invertir en una maestría
- Invertir en un inmueble
- Invertir en crowdfunding inmobiliario
Objetivos a largo plazo
- Lograr independencia financiera
- Conseguir un complemento en bienes raíces para la jubilación
- Invertir en un segundo inmueble
- Invertir en crowdfunding inmobiliario con plazos más extensos
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Escribe tus objetivos con el esquema SMART
Varios expertos concuerdan que los inversionistas que definen objetivos específicos y motivadores, son los que alcanzan mejores resultados que los que se rigen por metas poco ambiciosas y muy generales.
Nosotros te recomendamos que uses el esquema SMART, el cual consiste en definir objetivos inteligentes, que sean:
- eSpecíficos: claros y bien definidos.
- Medibles: que puedan determinarse mediante un resultado concreto.
- Alcanzables: deben tratarse de algo viable.
- Relevantes: deben tener relevancia para lo que quieres lograr.
- Basado en el Tiempo: cuenta con un marco temporal definido.
Para que sean específicos:
Sobre los objetivos específicos, estos implican tener como meta algo concreto, por lo tanto, deben dar respuesta a estas preguntas:
- ¿Quién está involucrado?
- ¿Qué quiero lograr?
- ¿Dónde?
- ¿Cuándo quiero conseguirlo?
- ¿Cuáles son los obstáculos y las limitaciones reales para alcanzar el objetivo?
- ¿Por qué quiero conseguirlo?
Para que sean medibles:
Aquí el objetivo es poder medir y evaluar si tu inversión ha tenido progreso, por esto debes tener en cuenta indicadores cuantificables, que respondan a estas preguntas:
- ¿Cuánto cuesta?
- ¿Cuántos?
- ¿Cómo sabré que lo he logrado?
Para que sean alcanzables:
Aquí es importante tu nivel de realismo, un punto importantísimo porque podrás identificar oportunidades que quizá no habías contemplado antes. Debes tener presente las posibilidades y tus limites personales y económicos para lograrlo. También debes tener presentes estas preguntas:
- ¿Cómo se puede alcanzar la meta?
- ¿Cuán posible de lograr es el objetivo?
Para que sean relevantes:
Este es un objetivo que está alineado con otras metas y que, por lo tanto, sólo tiene sentido en el conjunto del proyecto. Para definirlos es necesario responder a estas preguntas:
- ¿Vale la pena?
- ¿Es este el momento adecuado?
- ¿Coincide esto con otros esfuerzos o necesidades?
- ¿Eres la persona adecuada?
- ¿Es aplicable en el entorno socioeconómico actual?
Para que se base en el tiempo:
Tus objetivos siempre deben tener un límite de tiempo para conseguirse, deberás fijar una fecha, así concentras todos tus esfuerzos en llegar a la meta. Estos también responderán estas preguntas:
- ¿Cuándo recibiré mis rendimientos?
- ¿Qué puedo hacer hoy, mañana, en seis semanas, en seis meses, etc.?
Ejemplo:
Un buen ejemplo de un objetivo de inversión podría ser:
“A partir del 1 de julio del 2022, compraré un ladrillo o participación en 100 Ladrillos cada mes, durante los próximos dos años hasta conseguir $ 200.000 pesos para viajar por Sur América”.
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Elabora una estrategia
Después de definir y escribir tus objetivos debes crear una estrategia de inversión, es decir, un plan de acción con las acciones que vas a realizar para alcanzar tus objetivos.
De acuerdo con una publicación del diario El Economista invertir va mucho más allá de comprar instrumentos de inversión partiendo de lo que creemos adecuado o de lo que nos han dicho que es lo correcto. “Invertir es diseñar toda una estrategia que se adapte a cada una de las metas que nos hemos trazado”.
Cuando elabores tu estrategia ten en cuenta el horizonte de inversión, es decir, no es lo mismo invertir para un fondo para emergencias, donde necesitas liquidez casi inmediata y nula volatilidad, que invertir para tu jubilación dentro de 20 o 30 años, donde no necesitas liquidez y se puede tolerar una volatilidad para obtener mayores rendimientos a largo plazo.
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Ten tu plan financiero en orden
Esta etapa es muy importante porque no puedes estar evaluando en qué proyectos invertir si por el otro lado tienes una deuda enorme acumulada que se come con los intereses cualquier ganancia que puedas obtener con tu inversión, además con esto tu patrimonio se estaría viendo disminuido.
Lo que te proponemos es que antes de invertir revisa intensamente que tu situación financiera esté saludable, si no es así, concéntrate en pagar tus deudas y cuando termines ahí sí empieza con toda la energía la gran aventura de la inversión.
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No persigas rendimientos, enfócate en el riesgo
¿Sabías que todas las malas experiencias de inversión ocurren precisamente porque los inversionistas se deslumbran por obtener un rendimiento elevado y no se fijan en los riesgos?
Exactamente, se dejan seducir por inversiones que se ponen de moda, el oro, el bitcoin, entre otros, ponen todo su dinero en esos instrumentos que ni entienden y se olvidan de diversificar. Luego viene una fuerte caída o una serie de apuestas fallidas y pierden gran parte de su dinero.
Primero analiza qué tanto riesgo puedes tolerar, sé honesto contigo, asesórate muy bien y luego sí éntrale al juego.
En conclusión, los objetivos de inversión se definen partiendo de una serie de circunstancias actuales y futuras, los afectan factores como la edad, los ingresos y las perspectivas y expectativas que tengas.
Recuerda que es importante que los escribas, así los tendrás más claros y puedes usar el esquema de objetivos inteligentes SMART. También ten muy presente que los objetivos a corto plazo (3 a 12 meses) se centran en preservar el capital y sólo son adecuados para un determinado tipo de inversiones, mientras que aquellos a mediano y largo plazo, como los bienes raíces, permiten la generación de riqueza.
¿Qué más puedes hacer para definir tus objetivos de inversión? ¡Cuéntanos!