La seguridad, un eficiente sistema de recolección de basura y estrategias para la prevención de inundaciones son algunos de los puntos que se deben tener en cuenta para mejorar la calidad de vida en las ciudades modernas, hoy, la inteligencia artificial y el big data, permiten el desarrollo de soluciones tecnológicas para combatir las principales problemáticas en las metrópolis, precisamente esto es lo que hace que se conviertan en ciudades inteligentes, se valen de la tecnología para facilitarnos la vida.
Aunque en muchas películas de ciencia ficción este tipo de urbes parecen frías y sin corazón, lo que se busca con la integración de la tecnología es poder resolver a tiempo, incluso de manera anticipada, problemas como la congestión del tráfico, la inseguridad, situaciones con el transporte público.
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De acuerdo con Alejandro Trasmonte, presidente del grupo Smart City TNG en Argentina, hoy podemos ver 5 transformaciones que propician el desarrollo de ciudades inteligentes y son:
1 Comunicación ciudadana
Las ciudades inteligentes no podrían serlo sin plataformas que posibiliten la comunicación con los vecinos, sin herramientas que faciliten los reportes de incidentes a las autoridades, instrumentos con los que se pueda comunicar situaciones de emergencia, ya sea un accidente de tránsito, un robo o un incendio.
En este momento hay municipios que pueden ver en una pantalla con todos los incidentes, los monitoristas pueden ver con facilidad cuál es la zona afectada, además esta tecnología permite que la información se cruce con datos recolectados por cámaras o sensores.
Lucas Lanza, director de Smart City TNG entrevistado en Infobae dice que “la instalación de sensores permiten telegestionar y controlar en tiempo real, lo que sucede con diferentes servicios”.
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2 Recolección inteligente de basura
Actualmente se instalan sensores en los contenedores de residuos que informan en todo momento cuando ya están llenos, así la empresa de aseo o la dependencia gubernamental puede hacer mejor su trabajo al recolectar la basura de la ciudad, hay mejor administración de los recursos y ciudades más limpias.
3 Tecnología para la seguridad
Existen diferentes soluciones tecnológicas como las que buscan mejorar la seguridad de establecimientos comerciales, donde se han empezado a usar botones de pánico. Cuando los comerciantes se sienten en peligro, presionan este botón y desde este dispositivo se envía una señal de alerta a las autoridades.
De igual manera, existen sistemas de ayuda para las víctimas de violencia de género, como las app para dispositivos móviles, al presionar este tipo de botones de pánico, la persona pide ayuda al centro de control de la Policía, todo está geolocalizado, la información se le envía al patrullero más cercano a la zona de la emergencia.
4 Tecnología anti inundación
Es emocionante ver cómo muchas ciudades en el mundo están implementando sensores para conocer cuando sus alcantarillas están tapadas. La alerta llega a la dependencia de los municipios que se encarga del acueducto, y ésta puede reaccionar rápidamente para prevenir una inundación.
Hay ciudades donde se instalan dispositivos que envían datos a estaciones meteorológicas y pluviómetros. El objetivo es conocer, de manera oportuna, si va a haber crecientes de ríos que incrementen el riesgo de inundación.
Lo que se busca es anticiparse al problema y resolver qué estrategias de prevención tomar.
5 Estacionamientos inteligentes
El uso de sensores también permite que se pueda saber si hay o no lugar en los estacionamientos públicos. Los datos llegan a la central de monitoreo ciudadana y también al ciudadano a través de una app. Desde el teléfono celular, los habitantes podrán conocer dónde es el mejor lugar para estacionar sus vehículos.
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Ciudades inteligentes ¿Y las personas?
De acuerdo con el Foro Económico Mundial, World Economic Forum , las ciudades inteligentes deben prestar más atención a las personas que viven en ellas y no sólo a los dispositivos o al software que se vaya a usar.
Según un artículo publicado en la página web del foro, la mayoría de los participantes en los proyectos de ciudades inteligentes son políticos, consultores, académicos y empresas de tecnología. El organismo considera que falta el grupo más importante de participantes, los ciudadanos comunes y corrientes.
“En consecuencia, las estrategias y los proyectos se centran demasiado en la tecnología y no lo suficiente en los habitantes de las ciudades (…) Sin embargo, la investigación ha demostrado que todavía hay deficiencias y contradicciones con respecto a la verdadera centralidad de los habitantes. A la luz del hecho de que la centralidad de los habitantes y la participación ciudadana son factores decisivos para el éxito de cualquier transformación de una ciudad inteligente, se vuelve fundamental poner a los habitantes en primer lugar”.
Entonces … ¿Cómo poner en el centro a los ciudadanos?
En Montreal los ciudadanos se comprometieron a aportar ideas a través de cuatro encuestas, reuniones y una línea telefónica.
“En total, la ciudad recopiló datos de encuestas cualitativas de 7,601 residentes, lo que equivale a menos del 0.0045 % de la población de la ciudad. Es obvio que una parte no representativa de la población podría haber impactado la vida de todos los habitantes. Por lo tanto, necesitamos una recopilación de datos más científicamente representativa”.
En la publicación se considera que se debe incentivar y reunir opiniones de manera constante, no sólo en las etapas iniciales de los proyectos.
En la experiencia de Montreal, la línea telefónica recopiló más de un millón de puntos de datos que revelaron los deseos y las problemáticas de sus habitantes. Incluían carreteras, parques, recolección de residuos y alumbrado público.
“Mientras los expertos en tecnología discuten la inteligencia artificial, el análisis de datos, los sensores, la robótica o la cadena de bloques en el contexto de una ciudad inteligente, los habitantes parecen definir una ciudad inteligente con menos énfasis en la tecnología”.
El Foro Económico Mundial hace énfasis en que a los ciudadanos se les debe educar en tecnologías digitales y los comités directivos de las ciudades inteligentes tienen que incorporar, de manera adecuada, los problemas, deseos y necesidades de sus habitantes.
Ciudades como Estocolmo, Reikiavik, Ámsterdam y Copenhague tienen plataformas vinculadas en su sitio web y ofrecen aplicaciones a través de las cuales los habitantes pueden compartir información y sugerencias sobre la infraestructura y el entorno de la ciudad.
El problema con estas herramientas de comunicación es que casi siempre excluyen a las personas que no tienen conocimientos digitales, como los ancianos o a los habitantes menos informados, lo que definitivamente es excluyente.
“También hacen falta visitas domiciliarias y puntos de contacto fuera de línea, dedicados que se comuniquen en los periódicos locales y por cartas. Los ciudadanos también deberían tener acceso continuo y en línea a un sistema de votación para la selección y financiamiento de las propuestas de proyectos”.
Finalmente, los gobiernos deberían invertir en personal de tiempo completo que pueda iniciar y gestionar los proyectos de ciudades inteligentes. Tendría que ser un grupo muy diverso de ingenieros, programadores informáticos, estadísticos, biólogos, psicólogos, científicos sociales, abogados, ingenieros civiles, profesionales de la salud, profesores y otros que puedan crear un consejo de ciudad inteligente, equilibrado y experto.
¿Qué otros elementos consideras que deban tener las ciudades inteligentes?
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