Ahorrar para el retiro representa un desafío importante para los mexicanos, sobre todo para los que comenzamos a cotizar bajo la ley del Seguro Social de 1997, ya que como saben, la pensión otorgada representará menos de la mitad del último sueldo percibido, sin embargo, el retiro para las mujeres es un reto en el que se enfrentan mayores obstáculos para garantizar su autonomía en la vejez.
Los hombres tienen una mayor probabilidad de retirarse que las mujeres, pues tienen un mayor tiempo de cotización, pero las opciones de retiro mejoran y se acercan a las de los hombres cuando esas mujeres han tenido carreras laborales largas, mayor educación y un buen récord de contribuciones a su sistema de pensión.
En nuestro país, aunque parezca increíble, hay un acceso más restringido al empleo formal de las mujeres, pues la conciliación entre maternidad y trabajo sigue siendo una traba para la gran mayoría de las empresas en el país, aún, en pleno sigo XXI, aspirantes a ofertas laborales son rechazadas por ser madres o incluso, sus esposos no les permiten ingresar al mundo laboral para que se encarguen de las tareas domésticas y cuidados.
De igual manera, las carreras laborales más cortas están afectando negativamente la probabilidad de que las mujeres puedan retirarse completamente del mercado laboral, pues las que ingresan al mundo del trabajo lo hacen tardíamente, acumulando menos tiempo del requerido por el sistema pensional.
Es así como las mujeres tienden a posponer su jubilación hasta que financieramente sea posible retirarse. De igual manera, otro fenómeno que se ha observado por expertos es que muchas mujeres casadas se retiran antes de tiempo, al parecer, esto tiene que ver con el apoyo financiero que pueden recibir de su pareja.
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Más obstáculos y actividades menos valoradas
Según la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), la pensión de una mujer podría ser 43% menor a la del hombre, pues la mayoría de las mujeres son afectadas durante su vida laboral por las actividades que desempeñan o por el salario que reciben.
Un dato muy importante es que, de acuerdo con la Consar, cerca del 60% de las mujeres ocupan puestos en el sector informal, como trabajos domésticos, empleos casuales sin salario fijo, entre otros.
Hay que tener en cuenta que la situación es muy compleja para las mujeres con respecto al tiempo de cotización en el seguro social, pues muchas mujeres dejan de trabajar por embarazo o el cuidado de sus hijos.
En una nota publicada en el medio de comunicación Infobae , actualmente se puede ver precariedad en las carreras de las mujeres en comparación con las de los varones, una situación que inevitablemente tiene graves consecuencias al llegar a la edad adulta o jubilación. La Consar indica que, en el punto más alto de la trayectoria salarial, que son los 47 años, el salario de los hombres es 24% mayor que el de las mujeres.
Por lo tanto, los hombres acumularían durante su carrera laboral una pensión 14% más elevada que la de las mujeres.
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¿Por qué contar con el IMSS y un Afore es tan importante?
Recordemos que la pensión es una prestación económica a la que tienen derecho los trabajadores asalariados cuando se jubilan. Lo ideal es que después de muchos años de trabajo, el pensionado pueda descansar y tener tiempo libre sin tener que preocuparse por su subsistencia económica, pero en la vida real no es así, esto sólo será posible si a persona que se jubila tiene los ahorros suficientes para su retiro.
Todo el dinero que una persona ahorra en el transcurso de su vida laboral, junto con las aportaciones que realizó la empresa se acumula en una cuenta individual que es administrada por una entidad conocida como Afore, Administradora de Fondos para el Retiro.
Como, según la Consar, el 60% de las mujeres en México trabaja en el sector informal, las consecuencias son mucho más evidentes, pues la pensión se da con respecto al tiempo de cotización, esto quiere decir, que estas mujeres no tienen acceso a una pensión de Afore, la cual se obtiene al cotizar en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) o en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) con un mínimo de 250 semanas.
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) también ha estudiado este fenómeno, según sus investigaciones las mujeres viven más, pero perciben menos.
Esta organización explica que después de cumplir la edad indicada para el retiro en México, que son los 65 años, la esperanza de vida promedio de una mujer es de 17.3 años , mientras que la de los hombres es de 16.2 años.
Según la tasa de reemplazo (porcentaje de salario que recibe un trabajador retirado) promedio de una mujer, referente a su último salario, es de 28.4%, mientras que la del hombre es de 30.4%.
Es decir, si una mujer gana actualmente 10,000 pesos y cotiza bajo el régimen de la Ley del Seguro Social de 1997, su pensión será de 2,840.5 pesos mensuales, mientras que la pensión del hombre será de 3,042.7 pesos.
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Factores que complican el ahorro de las mujeres
En comparación con los hombres, existen factores que complican el ahorro para el retiro de las mujeres, a continuación, te explicamos cuáles son:
1. En primer lugar se encuentra la brecha salarial: Las mujeres reciben menos sueldo por el mismo puesto y responsabilidades que un hombre, afectando el monto cotizado en su Afore. Una mujer mexicana necesita trabajar 5 días más para obtener el mismo sueldo que su contraparte masculina.
2. La esperanza de vida: El promedio de vida de las mujeres es de casi 80 años, 5 años más que el de los hombres, lo que significa que su ahorro deberá distribuirse por más tiempo, disminuyendo la cantidad mensual a percibir.
3. Menor tiempo de cotización: Las mujeres son asignadas con el rol de responsables de su familia y las labores del hogar, lo que en muchas ocasiones resulta en un menor tiempo de cotización en el Seguro Social debido a que dejan de trabajar e incluso, al dedicarse 100% al hogar, nunca cotizan, por lo que no cuentan con ahorros para la edad adulta.
4. Distribución de sus ahorros: En México las mujeres destinan 7 de cada 10 pesos a la manutención de su familia, por lo que sus ahorros para el futuro se ven mermados.
Debido a estas razones, el porcentaje de mujeres menores de 40 años que podrán mantenerse a sí mismas en la etapa de retiro es del 24%, mientras que este porcentaje asciende a 35% en hombres. Desafortunadamente, mientras no se ataquen los problemas de desigualdad económica que viven las mujeres, el panorama no será tan alentador.
Sin embargo, existen instrumentos financieros como los seguros para el retiro, que pueden ayudar a crear un ahorro más sólido para el momento de tu jubilación, aquí te compartimos las aseguradoras que ofrecen este tipo de productos:
· MetLife: MetLife Retiro
· Axa: Mi proyecto R, Vida Inteligente
· GNP: Plan de Retiro no deducible, Plan de Retiro deducible art.151 ISR, Plan de Retiro deducible art. 187 ISR
· Seguros Monterrey: Imagina Ser
En resumen, uno de los grandes desafíos de las mujeres en nuestro país es poder jubilarse y hacerlo de manera digna, por lo tanto, les recomendamos a todas nuestras lectoras que se informen, que acudan a su Afore o su entidad financiera de confianza, para que conozcan los mejores planes y empiecen su ahorro desde ya, de igual manera, es importante que contemplen a la inversión como una forma de llegar a la vejez con tranquilidad , pues su dinero estará trabajando para que ellas puedan descansar.
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