Dentro de las opciones para invertir se encuentran una variedad de instrumentos de alto riesgo entre los cuales puedes optar, como son las acciones en la bolsa de valores, los fondos cotizados (ETFs), el mercado de divisas, las inversiones en startups, la participación en mercados emergentes o incluso la exploración de nuevos mercados con potencial de crecimiento.
Instrumentos de alto riesgo
Los instrumentos de alto riesgo son vehículos de inversión que ofrecen la posibilidad de obtener altas ganancias, pero también conllevan un nivel significativo de incertidumbre y volatilidad. Estos instrumentos suelen estar asociados con activos financieros cuyos precios pueden experimentar fluctuaciones bruscas en periodos cortos de tiempo, lo que implica un riesgo considerable para el inversor.
Antes de invertir y comenzar a hacer que tu capital trabaje para ti, generando rendimientos y protegiéndolo contra la inflación, es esencial tener en cuenta ciertos aspectos que te caracterizan como inversionista. Uno de los más importantes radica en tu capacidad para tolerar riesgos financieros.
Las inversiones se clasifican comúnmente en tres categorías según el nivel de riesgo asociado: bajo, moderado y alto. Este concepto se refiere al grado de incertidumbre inherente a cualquier tipo de inversión, como lo explica detalladamente Santander Asset Management en su plataforma en línea.
¿Dónde invertir mi dinero?
Los instrumentos de alto riesgo se distinguen por su naturaleza altamente fluctuante, en contraste con las inversiones de bajo riesgo que presentan mínimas posibilidades de pérdida o de arrojar resultados negativos.
El nivel de riesgo está vinculado estrechamente a las probabilidades de recuperar el capital invertido y de obtener rendimientos. Como señala Iván Carmona, cofundador y director del área comercial y de mercadotecnia de la plataforma de inversiones inmobiliarias 100 Ladrillos, prestar dinero al gobierno suele ofrecer mayores garantías de recuperación en comparación con prestar a un familiar cercano.
Entre los instrumentos de alto riesgo disponibles para invertir se incluyen acciones en bolsa, divisas y sus derivados, así como participaciones en empresas tecnológicas o en mercados emergentes.
Si el instrumento en el que deseas invertir no figura en el mercado mexicano, pero está registrado en el Sistema Internacional de Cotizaciones (SIC), puedes solicitar a tu casa de bolsa que realice la inversión en tu nombre.
Los bienes raíces son un buen activo para invertir.
Acciones
Invertir en acciones es una de las opciones más comunes y apreciadas en el mundo financiero. Sin embargo, para incursionar en este mercado, es fundamental contar con asesoramiento profesional o poseer el conocimiento adecuado que te permita seleccionar las mejores alternativas según tus objetivos financieros. Grupo GBM destaca que, al invertir en acciones, te conviertes en accionista de una empresa y, por lo tanto, tus rendimientos estarán ligados al desempeño de dicha compañía. Si la empresa crece y su valor aumenta, tú también obtendrás beneficios, pero en caso contrario, podrías enfrentar pérdidas financieras.
ETFs
Los fondos de inversión cotizados (ETFs, por sus siglas en inglés, Exchange Traded Funds) son instrumentos de alto riesgo financieros que reproducen el rendimiento de índices del mercado. Estos títulos pueden adquirirse fácilmente a través de una casa de bolsa o un banco.
Startups
Las empresas emergentes suelen ofrecer oportunidades de rendimiento atractivas. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el éxito de estas empresas no está garantizado, lo que significa que obtener altos rendimientos conlleva riesgos significativos. Este principio también se aplica a los nuevos mercados o sectores en crecimiento: aunque puedan presentar potencial para rendimientos sólidos, no hay garantías absolutas de éxito.
Divisas
Cuando inviertes en divisas, puedes beneficiarte de la apreciación de una moneda frente a otra. Dado que los tipos de cambio fluctúan constantemente, si la moneda en la que has invertido se fortalece, el diferencial resultante se traducirá en ganancias para ti, según lo señala Grupo GBM.
Criptomonedas
Invertir en criptomonedas conlleva un riesgo significativo debido a su alta volatilidad y su falta de respaldo por parte de alguna moneda o activo tangible; en su lugar, su valor se determina únicamente por la oferta y la demanda del mercado. Además, es importante tener en cuenta que las criptomonedas no están reguladas y no cuentan con la protección de los bancos centrales.
Aunque se están llevando a cabo procesos legislativos al respecto, estas monedas digitales aún operan al margen del control gubernamental y de las instituciones financieras tradicionales.
Beneficios de invertir en instrumentos de alto riesgo
Recuerda que, antes de elegir un instrumento, tienes que conocer tu perfil de inversionista y tener claro cuál es tu nivel de tolerancia al riesgo, el monto que estás dispuesto a invertir -sin descapitalizarte para cubrir el día a día- y el plazo que deseas mantener tu inversión.
La principal ventaja de invertir en instrumentos de alto riesgo contra las de bajo riesgo está relacionada con la ganancia que obtienes, pues, como ya se dijo, a mayor riesgo, las inversiones generan mayores rendimientos.
Contar con un portafolio diversificado ofrece una capa de protección esencial en caso de sufrir pérdidas. Al diversificar, es crucial incorporar tanto mercados como empresas de alto riesgo, pero equilibrándolas con alternativas más conservadoras. Este enfoque, según Monex en su plataforma en línea, puede resultar en un aumento de los rendimientos obtenidos por tus inversiones.
Asumir ciertos niveles de riesgo también puede abrir la puerta a oportunidades únicas. Por ejemplo, invertir en startups, explorar nuevos mercados o participar en sectores en fase de crecimiento pueden ser opciones atractivas.
Además, las inversiones consideradas de alto riesgo suelen caracterizarse por su agilidad en los mercados. Dado que estas opciones pueden no estar tan reguladas y se adaptan fácilmente a las fluctuaciones del mercado, como señala Monex, ofrecen la flexibilidad necesaria para aprovechar las cambiantes condiciones financieras.
FUENTE: EXPANSIÓN