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Inversionista activo o pasivo. ¿Qué perfil tienes?

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Seguramente has escuchado hablar sobre el inversionista activo o pasivo, definiciones cruciales a la hora de invertir, porque tienen que ver con nuestras actitudes frente a los proyectos de inversión. Mientras que el pasivo, también llamado defensivo, busca realizar inversiones a largo plazo de forma selectiva y cautelosa, el inversionista activo aprovecha su talento, conocimiento y experiencia para beneficiarse de los momentos de oportunidad que le brinda el mercado, buscando rentabilizar mejor. 

De acuerdo con una publicación del diario El Economista , fue el gran inversionista Benjamín Graham, autor del libro The Intelligent Investor, el que nos explica que hay dos clases de inversionistas, pasivos y activos. 

Otro escritor que habla sobre el inversionista pasivo y el activo es Francisco Álvarez, autor del libro: La Bolsa en tu Bolsillo, el cual explica que un inversionista pasivo es la persona que tiene cuentas corrientes, fondos para el retiro, cuentas de ahorro e incluso seguros de vida para inversión o ahorro, y esto ocurre porque al ser operaciones pasivas, les prestan capital a las entidades financieras y estas están obligadas a retribuirle un rendimiento. 

Para que el dinero no quede sin funcionamiento, el capital de un inversionista pasivo circula en los mercados financieros, por ejemplo, en la bolsa, para que así no se cumpla el adagio popular: “dinero quieto es dinero muerto”. 

Por otro lado, según Álvarez, el inversionista activo es el que invierte en la bolsa directamente, ya sea mediante una casa de bolsa con asesoría financiera o por su cuenta. Aquí hay un punto muy llamativo y es que, a diferencia del inversionista pasivo, el riesgo que el inversor toma le representa un rendimiento mucho mayor. 

Esto quiere decir que, el inversionista activo es una persona especializada, muy bien informada acerca de los diferentes instrumentos que hay en el mercado, le llama la atención el mercado de renta variable e incluso el mercado de derivados financieros. 

El inversionista pasivo quiere más seguridad y plazos largos 

Un inversionista pasivo puede ser un principiante o un inversor que tiene poco conocimiento del mercado y que se siente incómodo con la inversión activa, sienten que es más eficiente apostarle a inversiones pasivas, que estar corriendo en el mercado para obtener ganancias momentáneas. 

Les gustan los proyectos a largo plazo, cuanto más tiempo permanezcan en la inversión, menor será el riesgo de obtener un mal resultado. 

Recordemos que la inversión pasiva es aquel tipo de inversión que no busca ir más allá de los rendimientos estándar y medios del mercado, sino que busca seguir el movimiento establecido sin correr riesgos. 

Una de sus características principales es que el rendimiento no es tan alto como en la inversión activa, pues no hay que olvidar que a mayor riesgo mayor rendimiento. 

En pocas palabras, un inversionista pasivo prefiere la compra de productos de inversión basados en rendimientos a largo plazo y una gestión limitada, no buscan de manera activa superar el rendimiento del mercado, sino que intentan replicar el rendimiento índice establecido. 

En lo que nos compete, la industria inmobiliaria, un inversionista pasivo sería el que compra un departamento y lo renta durante mucho tiempo. Este inversor recibirá rentas de manera estable, su inmueble aumentará de valor por el paso del tiempo y por el mantenimiento que le de a su propiedad, no importa que haya momentos de tiempos muertos, se puede considerar que el dinero estará trabajando sin estar en la búsqueda constante de nuevos rendimientos. 

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El inversionista activo, cada vez más inquieto y especializado 

También llamados inversionistas autodirigidos, son aquellos inversores que realizan una serie de operaciones diarias, son altamente sofisticados y tienen mucho conocimiento del mundo digital. 

El inversionista activo es el que se dedica a explotar las fluctuaciones de precios a corto plazo, podríamos decir que se la pasa negociando a un ritmo diario. 

De acuerdo con una publicación de Refinitiv , la pandemia estimuló a estos inversionistas activos. 

Según el informe: El Estándar de Oro del Wealth Management: Redefiniendo las Necesidades de Datos de los Inversores” , el 44% de los inversionistas activos de la generación Millennial aumentaron su frecuencia de negociación durante el período de mayor volatilidad del mercado financiero generado por Covid-19” 

Esta tendencia fue impulsada en gran parte por la continua revolución de los datos, que ha logrado que los inversionistas tengan acceso a  cantidades cada vez mayores de información las 24 horas del día, los 7 días de la semana, los 365 días del año, lo que ha dado lugar a una nueva generación de personas invirtiendo.

Un inversionista activo puede ser el que invierte en las criptomonedas, ya que sin importar su alta volatilidad, ya que es un sector absolutamente cambiante, este inversor se la pasa informándose a diario, analizando el mercado para hacer mejores jugadas, saber cuándo es el momento para invertir más o para retirar su inversión. Es como jugar a cara y sello o con el destino. 

¿Qué tipo de perfil hay en el crowdfunding inmobiliario?

Finalmente podemos concluir que el inversionista de crowdfunding inmobiliario, si bien, puede ser un inversionista pasivo que espera pacientemente los resultados con el largo plazo, también puede ser un inversionista autodirigido:

  • Es un inversionista muy bien informado, que tiene un dominio de las plataformas digitales y que usa los servicios digitales de los bancos para hacer transacciones. 
  • Sí quiere rendimientos y quiere ir más allá del índice, pero quiere avanzar con cautela, por esto, lo seduce poder adquirir propiedades que ganan plusvalía y que permiten ganar rentas. 
  • Está consciente que para tener mejores rendimientos debe impulsarse a proyectos de largo plazo y además comprende que un portafolio diversificado a plazos más extensos puede ofrecer mejores ganancias. 
  • Adquiere propiedades en preventa y compra y vende sus participaciones en el mercado secundario, le gusta negociar en las plataformas digitales, pero se siente tranquilo porque su dinero trabaja por él y la plataforma de crowdfunding también. 

En conclusión, ambas maneras de invertir son interesantes y tienen sus ventajas, el éxito de ambos métodos tiene que ver con el perfil y la personalidad de cada inversionista, pues de su carácter, expectativas y objetivos, depende la construcción de un portafolio rentable y el éxito en los movimientos de las inversiones. ¡Y lo mejor es que para todo hay perfiles!

¿Qué tipo de inversor eres? ¿Inversionista activo o  pasivo? 

¡Cuéntanos!